Y aunque todavia no me lo creo, es un regalo para mi y sin ningún tipo de motivo. Eso si que es ser una buena amiga (aunque no nos conozcamos en persona). Mil gracias Mamen, nunca te podré agradecer que te hayas acordado de mi y por supuesto el haberme obsequiado con esta maravilla de trabajo (aunque tengo que reconocer que me moría de ganas de terner algo hecho por tí). Muchísimas gracias Mamen.
**-----------------------------------------------------------------------------**
(Perdonar mi torpeza pero me habeis dejado comentarios en esta entrada que sin querer he rechazado en vez de haberlos publicado, lo siento)