Recuerdo cuando en lugar de fotografo, era militroncho. Tenia en Alicante un Alférez que nos decía que si le veíamos por la calle no le saludásemos, que el fuera del cuartel era fotografo de Playboy y que no quería saber nada de militares. Supongo que ese trabajo, el de fotero de Playboy, es uno de los mas deseados, un montón de pasta, chicas guapas, viajes, dietas… vamos, el paraíso en vida. Si, yo tambien soñaba con el cuando era un un mico.
Aun no he llegado a hacer fotos para Playboy como a mi me gustaría -acepto empleos, aviso a los directivos del conejito-, con sueldazos, dietas y viajes, pero la verdad es que, al menos, he tenido modelos de playboy para mi y puedo hacerme una idea de cómo es eso.
Molar mola, claro, y mola mas aun ir con los colegas de farra y enseñar en fotos -tus fotos- a una chica guapísima. Vacilas un montón y te conviertes en el héroe de los tíos, aunque despídete de ligar con cualquier fémina que vea lo que estas haciendo -a menos que se acerque a preguntar que porqué tienes fotos de tías medio en bolas en un bar, cosa que nunca me ha pasado, todas se imaginan lo peor-. Es uno de los puntos negativos que tiene el ir por ahí sacando fotos a mujercillas ligeras de ropa, pero hay muchas cosas buenas -aunque el sueldo sea de pena-.
Por ejemplo, yo llego a casa, pongo el google y busco fotos de tías en pelotas. Me ve mi novia y me pregunta que hago… coño, pues inspirarme, aprender de los maestros, mezclar ideas… También puedo meterme en foros de los buenos y decir que estudio a la competencia... es decir, se puede ver porno constantemente en casa con tu chica y no pasa nada -nota: no abusar de esta excusa o al final si que pasa, o, mejor dicho, NO pasa-.
También mola que puedo tener en el salón una foto de dos metros de Angelina Jolie, y tampoco pasa nada. La putada es que si viene visita que no te conoce puede pensar que eres un salido… pero eso se soluciona rápido diciéndoles ‘sentaros aquí, bajo MI foto de Angelina…. Tengo que hacerle otra porque esta es ya de hace un año’. Quedas como dios, o como un vacilón despreciable, pero al menos no pareces un salidillo.
Otra cosa que mola es que puedes mirar a un montón de tías por la calle, con novia y todo al lado. Si pregunta que haces le dices… ‘nada, pero es que esa chica seria genial para esta foto que te dije…’ procurando que ‘lo que dije’ sea un tipo de foto que tu chica ya te dijo que no quería claro, porque si no, te pilla.
Lo que no puedes intentar es ligar entrando como fotografo ‘oye, te he visto y creo que encajas perfectamente para una exposición que estoy montando’. ¡¡ERROR!! Por una extraña y misteriosa razón… la gente cree que los fotógrafos somos un mito. Es decir, nadie te cree… ¡nunca! Si yo enseño a alguien que no me conozca una de mis fotos de, por ejemplo, Jenifer Lopez, me preguntan ‘¿La has hecho tu? Anda… mentirosillo...' Y claro, o llamas a Jenny con el desfase horario y la piíllas durmiendo… o te vas con las orejas gachas. Supongo que esta gente pensara que los fotógrafos, cuando acabamos, nos desinflan y nos guardan en el trastero para la próxima vez.
En fin, que aunque esta bien, lo de ser fotografo de Playboy o, al menos, hacer fotos CON Playboy, no es tan chachi como la gente lo pinta. Y no, nunca te tiras a la modelo, la mayoria de veces, porque nos hacemos amigos.
Y aqui, completa, la ultima sesion que hice.