me vuelvo acrítico, me siento más polulista no-científico, me reconvierto al peronismo de la resistencia, me siento un hombre feliz, un hijo feliz, un padre feliz, un compañero feliz..desde este momento me entrego a la certeza y dejo la duda existencial que moldee en los 90, para pasar a ser parte del colectivo social que representa y que me representa... Desde este momento se que lo que viene es un tiempo de combatir con alegría, de volver a la calle de sentir felicidad por un proyecto que encarna mis anhelos más preciados, el proyecto que me volvió el norte de creer que la política es un herramienta de transformación social. Me acuerdo de pendejo en el secundario pidiendo por memoria y justicia de los 30000 compañeros , me acuerdo de mis amores frustrados, de mis amores de hoy...me acuerdo de todo y de todos. Galo, mi hijo, vivirá en un país mejor de eso estoy seguro y lo escribo entre el llanto de la emoción y la felicidad de saber que mi presidenta es la que conduce los destino