Lógico amor

Cuando la pasión se vuelve sensata,
y la lógica al amor gobierna,
la relación nace tan tierna
por la razón que la desata.

Lo grande es tan pequeño
y lo único tan vulgar,
nada ocupa tu lugar
siendo tú mi único sueño.

Cuando la pasión y la sensatez
se unen a lo correcto y deseado,
todo lo antes amado
se vuelve una pequeñez.

Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Quédate hasta que viejos

Como las palabras que van al punto
mi mirada se dirige a la tuya,
la toma pues la cree suya
y la quiere de si muy junto.

Por eso no verte es tan triste
y de mi la felicidad aleja,
esto no quiere ser una queja
pero estoy así desde que te fuiste.

Vuelve y trae contigo aquello
que supiste llevarte lejos,
quédate hasta que viejos
para volver todo más bello.


                 Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Viajando en su sonrisa

En su mirada me encuentro
viajando en su sonrisa,
me conozco a toda prisa
aflorando lo que llevo dentro.

Es hasta el cielo elevarse
pisando la senda de la realidad,
caminando con la libertad
de saber no va a equivocarse.

Logrando donde nadie llevarme
es que no me voy a ningún lado,
quedo a su lado recostado
pues se no voy a asustarme.

                               Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Te voy a hacer soñar.

Te voy a hacer soñar
viajando por los placeres,
a disfrutar de los deberes
aprendiendo vamos a volar.

A fuerza de mágicos besos
podremos disfrutar del viaje,
rodaremos sin pagar peaje
buscando un par de esos.

Cuando viajas a mi lado
tu compañía es el destino,
a tu lado esta el camino
y a eso no hay nada comparado.


Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Única

Única como la sonrisa de tu boca
de mi cariño eres la dueña,
contigo mi razón es que sueña
y por ti mi cabeza que esta loca.

Es en ti que mi sueño reposa
y se completan mis esperanzas,
digna de todas las alabanzas
eres la mujer más hermosa.

Tu simpleza tan llena de vida
nos brinda a los demás belleza.
logrando que sea tuya mi cabeza
y de mi ser la consentida.


                      Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Tu recuerdo sonriente

Se asoma una sonrisa
al tu sonrisa recordar,
imposible de olvidar
aquella sueva brisa.

Tu recuerdo sonriente
se presenta en mí seguido,
ha en mi conseguido
volverme un hombre valiente.

Con cada una de tus palabras
me da a mí mas intriga,
mas razón para que consiga
que por fin tu corazón abras.

Te sueltes y seas tu misma
sin vergüenza ni resguardo,
que sea tu recuerdo el que guardo
sin la ayuda de ningún prisma.

Osvaldo Facundo Benítez Meabe

La belleza

De polleras viste la belleza
y no usa zapatos con taco,
todo se vuelve opaco
al rededor de su simpleza.

Su hablar algo acelerado
y su risa cuasinerviosa,
la simpatía de una Diosa
con modal bien educado.

La belleza materializada
se gana el cariño sola,
va coronada en su aureola
y de alegría rebasada.


          Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Mientras estas durmiendo

Mientras estas durmiendo
yo me encuentro soñando,
mientras estas descansando
tu recuerdo en mí sonriendo.

Cuando a la mañana despiertas
yo en tus sueños descanso,
tranquilo como un remanso
te acompaño aunque no adviertas.

Como las rimas que mecen tu sueño
estos versos son mi holganza,
con escribirte ya me alcanza
para andar por la vida risueño.

                      Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Derrotando a la tristeza.

Extraña mueca particular
única y tan estimulante,
verla es tan gratificante
y a la vez tan espectacular.

Voy por cualquier camino
esperando encontrarte,
no me canso de buscarte
ni importa si me lastimo.

Pues es un placer verte
expresando tanta belleza,
derrotando a la tristeza
vivo para no perderte.

Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Se hizo tarde temprano.

Te supe robar una sonrisa
y la lleve conmigo lejos,
no nos volvimos viejos
pero el tiempo pasó de prisa.

Se hizo tarde temprano
y con la hora te fuiste,
esperándote no volviste
dejando tu sonrisa a mano.

Bien guardada esta conmigo
esperando volverte a ver,
rogando me puedas devolver
mi corazón que esta contigo.

Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Recuérdame

Recuerda mis sonrisas a tu mirada
mis ojos perdidos en tu sonrisa,
nuestros abrazos ante la brisa
y mi calor sobre tu almohada.

Recuerda nuestras conversaciones
mis caricias y mis dolores,
nuestra locura de colores
los dos gritando nuestras canciones.

Recuerda cuanto nos hacíamos falta
cuantos abrazos se hacían eternos,
tanto hacíamos solo para vernos
que enfermos nos dábamos el alta.

Recuerda que si me olvidas muero
y todo cuanto fuimos se esfuma,
como el mar queda sin espuma
de nuestro amor quedara solo el cuero.


                   Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Pd: que foto meti...

A san Valentín le debo

Disparo lejano pero certero
el de este cupido entrometido,
que mi corazón ha sometido
al amor más placentero.

Morfeo me tomo en sus brazos
haciéndome vivir un sueño,
sintiéndome que soy tu dueño
y que míos son tus abrazos.

Entregado a tu encanto
se que a san Valentín le debo,
este manjar del que te bebo
hasta olvidarme del espanto.

Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Robaste mis sentimientos

Como una hoja que se eleva
por capricho del viento,
así vuela lo que siento
cuando tu amor se lo lleva.

Desprovisto de algún rumbo
flotando va sin destino,
como viajante clandestino
ya a nadie es que incumbo.

Me soltaste en pleno vuelo
provocando mi descenso,
sacudiendo lo que pienso
y pegándome contra el suelo.

Aclaraste mis pensamientos
y pudiste darme paciencia,
artista de tu propia ciencia
me robaste mis sentimientos.


Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Entender lo que no digo

Si pudieras todo leer
cuanto tengo para contarte,
sin tener yo provocarte
para que me quieras creer.

Si entendieras el dialecto
con el que mi cuerpo expresa,
por no decir que confiesa
que por ti siente tanto afecto.

Si la atracción te bastara
para entender lo que no digo,
te quedarías tú conmigo
hasta que el amor te alcanzara.

Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Durmiendo a mi lado.

Soñando que estas a mi lado
apoyo mi cabeza buscando sueño,
pensando que soy tu dueño
y con vos estoy acurrucado.

Por tu encanto y calor mecido
durmiendo a tu lado placentero,
sueño con darte el mundo entero
para tu amor tener complacido.

Vencido caigo en la almohada
agradeciendo tenerte a mi lado,
durmiendo estoy de costado
soñándote en mi recostada.

            Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Atlántico tan pacifico

Como un cuadro magnifico
se presenta mágica la estampa
de cuando el sol acampa
sobre el atlántico tan pacifico.

De olas únicas e irrepetibles
que cual fuegos artificiales,
dibujan en el mar tus iniciales
ante mis ojos tan sensibles.

Conmovidos por la belleza
pierden del tiempo noción,
no cabe en mi tanta emoción
al admirar tanta simpleza.

Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Un globo al viento.

No quieras controlar
un globo al viento,
déjalo que no miento
si digo que sabe volar.

Que el viento le da rumbo
que el sol le da el calor,
el tiempo le da su color
y el agua lo deja moribundo.

Que trace solo su destino
yendo a donde la corriente,
veraz que libre se siente
entregándose al destino.


        Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Aquello que más admiro.

No hay quien me quite la paz
ni quien me saque la cordura,
hoy es que vivo con soltura
más allá de lo mordaz.

esquivando voy a las maldades
y recorriendo la senda buena,
que como la música que suena
disfruta de todas las tonalidades.

En mí encontrándose
aquello que más admiro,
que nace cuando te miro
y que de mi termina adueñándose.

             Osvaldo Facundo Benítez Meabe

Así te quiero

Para decirte lo que siento
yo te quiero blanca negra dorada,
te quiero loca cuerda y encabronada
y sabes bien que no miento.

con un toque de engreída
y tu actitud avasallante,
enamoras en un instante
por estar tan convencida.

Me quedo con tu simpatía
y tus ataques de locura,
sos la cura de la amargura
y destierro de la apatía.

Te quiero así como viniste
sorpresiva y llena de encanto,
es que tú no sabes cuanto
me alegro que tú apareciste.

Osvaldo Facundo Benítez Meabe

En el cielo pintado

Su nombre en el cielo pintado
y en color de mi bandera,
la conocía en la primavera
y ya me tiene hipnotizado.

Naufragando en su sonrisa
me enamore de su mueca,
de su cara de muñeca
y su boca escurridiza.

Supe robarla un domingo
y al sol pensarla mía,
perdido en su simpatía
la verdad ya no distingo.

Osvaldo Facundo Benítez Meabe