¡Hola a tod@s!
Hace ya algunos meses me hice con una caja de madera sencilla. No sabía bien bien para que la emplearía pero tenía la certeza de que le daría un uso seguro, jajajaj.
Estuvo bastante tiempo haciendo su uso pero sin demasiada personalidad. Hasta que por fin decidí darle salida a unas cápsulas de café de una conocida marca, que también había guardado sin saber con que finalidad. Creo que esta costumbre de acumular materiales sin un fin más o menos próximo es "herencia" de la que fue durante cinco años mi compañera de trabajo. Una artista de las manualidades, la escritura, la ilustración, el canto...muy completita ella, jajaja.
La verdad es que el proceso es sencillo y el resultado muy colorido. Le pinté el fondo negro para que resaltasen más las cápsulas.
A ver que os parece...
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Recordad que siempre estaré encantada de recibir vuestros comentario.
Gracias por acompañarme en esta aventura. Espero volver a veros pronto.
Pues a tu compañera segiro que le gusta mucho, muchísimo y que te preguntaría si no tiene tapa😉
ResponderEliminar🤣🤣🤣pues no, no tiene tapa. La utilizo para poner las vitaminas y medicamentos que tomo a diario y me es más cómodo así. Y además necesaria tenerla al lado para que me inspirará con la tapa😜😘😘😘
EliminarMás original no puede ser la caja y una buena manera de reciclar.
ResponderEliminarMe encanta :)
Gracias Paqui!!! Encantada de que te guste.
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