¿Qué experiencias recreas una
y otra vez en tu vida?, ¿qué forma de ser, sentir y actuar te hace sentir
ansiosa y a la defensiva?, ¿qué experiencias te hacen perder el control y
actuar de una forma autodestructiva, impulsiva e irracional? Reconoce a tu
sobreviviente.
¿Qué es mi
sobreviviente?
Es una armadura que nos
ayudó a sobrevivir en la infancia pero repercute en nuestra adultez.
-Son formas de pensar, sentir
y actuar que me permitieron sobrevivir al dolor del pasado.
-Son los hábitos que
desarrollamos para ser queridos y aceptados por los padres.
-Son formas de adaptación al
dolor de la infancia.
-Son hábitos obsoletos
defensivos que me impiden ser yo mismo.
-Son memorias del dolor del
pasado que activan formas defensivas y automáticas de ser.
-La sobreviviente es la
respuesta que desarrollamos ante el abandono, el rechazo, la exigencia, la
descalificación, la soledad, el caos.
-Son decisiones tempranas
respecto a mí mismo y la vida que hoy no me permiten vivir algo diferente y
nuevo.
-Es mi armadura y mi
mecanismo de defensa que me lleva a patinar en el mismo dolor.
Todos vivimos experiencias en
nuestra infancia que nos dejaron formas de mirarnos, formas de responder ante
la vida, hábitos de sentir, fomentadas por la forma en que crecimos y
reforzadas a través de la vida.
¿Hacia dónde nos lleva
actuar desde la sobreviviente?
- A
recrear las mismas experiencias de dolor.
- A
confirmar las ideas de dolor del pasado
- A
vivir desde un mecanismo irracional de defensa.
- A
defendernos del entorno y nos aleja de la intimidad y la autenticidad.
- Cuando
se activa nuestra sobreviviente, la vida vuelve a doler.
- Nos
aleja de quien en verdad somos.
- Es común identificarte con
las actitudes defensivas de tu sobreviviente y pensar que esa eres tú.
- La mayoría de las personas
actúan desde la sobreviviente y no se conocen a sí mismas.
“Quien en verdad eres
se manifiesta cuando te sientes, aceptada, reconocida, querida y a
salvo”.
Mecanismos de
adaptación y defensa:
- El
perfeccionista
- El
hipocondriaco
- El
voraz
- El
aislado
- El
Ser bueno a toda costa.
- El
evasivo (no pasa nada)
- El
complaciente
- El
competitivo
- El
conflictivo
- La
victima
- La
dura
- La
rescatadora
- El
racional
- El
intelectual
- La
compulsiva
- Detrás
de ese mecanismo compulsivo, ansioso, irracional, automático, defensivo esta tu
sobreviviente.
¿Cómo saber que estoy
desde mi sobreviviente?
- Porque es una forma de ser
que tiene su origen en la baja autoestima y el dolor.
- Porque fue la forma de
buscar aprobación de tus padres.
- Porque
es rígida y sientes que no puedes dejar de serlo o al no ser así te sientes
vulnerable.
- Porque
cuando activas ese mecanismo no eres objetivo ni estás en el aquí y el ahora.
- Porque
se activan castigándote o castigando a los que amas.
¿Porque es negativo
vivir desde la sobreviviente?
1.
Porque nos aferra al dolor del pasado
2.
Porque nunca nos vamos a sentir nosotros mismos y liberados.
3.
Porque nos aleja del amor y las relaciones auténticas.
4.
Porque nos aleja de nuestra verdadera naturaleza y eso nunca nos hará
sentir felices.
EJERCICIO:
- Piensa
en la última en que tuviste una discusión o un problema y perdiste el control.
- ¿Lo
que sentías en ese conflicto tiene alguna relación con alguna escena en tu
infancia?
“La sobreviviente
recrea la realidad en la que creció una y otra vez porque la conoce y se siente
a salvo en ella aunque sea una realidad carente y conflictiva”
La sobreviviente
confirma ideas como:
- “No
soy suficiente”, “no hay nadie en quien confiar” “al final todos me abandonan”,
“nadie me quiere”, etc.
- En
la sobreviviente no hay adulta ni resolución objetiva y auténtica de la
realidad.
¿Qué activa a mi
sobreviviente?
1. Experiencia que se parecen
al pasado.
2. Personas que son como
nuestros padres.
3. Cuando soy inconsciente y
vivo en el automático.
4. Pérdidas o situaciones
estresantes del presente.
5. Cuando permito relaciones
violentas.
¿Cómo desactivar a mi
sobreviviente?
1. Conocer que activa a mi
sobreviviente y cuál es su dolor.
2. Estar más en el aquí y en
ahora, desarrollar adulto.
3. Ganar control de mis
impulsos, respirar y observar mi conducta.
4. Ejercitar un auto diálogo
nutritivo.
5. Contruír relaciones
adultas basadas en el respeto y el afecto.
6. Conocerme a mí mismo.
Auto Diálogo Nutritivo:
“Mi sobreviviente, agradezco tu
presencia que me permitió hacerme fuerte de las formas de trato de mis padres y
las situaciones dolorosas de mi infancia. Hoy aprendo a desarrollar
formas más conscientes y adultas de estar en la vida. Hoy sé que soy valiosa,
suficiente, merecedora y capaz de protegerme y vivir en paz siendo yo misma”.