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viernes, 1 de agosto de 2008

El probe Migué, el nuevo Adán progresista

Cuando las familias españolas entonen el tan macabro "el final del verano llegó", caerán en la cuenta de que ese final no es más que el principio de otra realidad mucho más macabra aún, si cabe, la realidad cotidiana de los precios, la hipoteca y las facturas.

Aunque si vuelven más lentos de lo habitual sabrán que están contribuyendo a la mejora de la renta nacional y el empleo. Demagogia barata para un chantaje en toda regla a los españoles. Porque Sebastián, el probe Migué, inventado el pecado, castiga a los pecadores a pagar de sus bolsillos la estupidez de un plan energético que obvia la única solución coherente, la energía nuclear.

Y aún habiendo un millón y pico de coches eléctricos en 2014, no habrá corriente suficiente para darles el calambrazo que les haga surcar las bellas y tenebrosas tierras de España. Una bombilla cortesía del gobierno por año, las señales de tráfico marcando un 20% menos de velocidad y las entradas a las ciudades a oscuras, son más medidas absurdas y estúpidas con una marca de la casa, ya conocida por los que suelen pagar el pato del adanismo progresista, la inconfundible marca de los gobiernos socialistas.

Los ciudadanos que ya estamos hartos de estas medidas inquisitoriales que sólo producen una intervención directa del estado en la vida privada y una elevación sangrante del coste de la vida, no podemos más que darnos porrazos contra la pared. La cuestión es, ¿están dispuestos los que confiaron que Zapatero, Solbes y su nuevo Adán, llevaría a España a la cumbre del bienestar y el estado de derecho no ya mundial, sino universal, a decir basta ante tanta estupidez, tanta demagogia y tanta pobreza? Y otra, ¿psicopatía?

martes, 29 de julio de 2008

La crisis deberemos pagarla todos

Solbes, ese hombre que afirma en voz baja, cual sabio que revela arcanos insondables y que muy pocos están preparados y dispuestos a conocer, vuelve a exhalar los oráculos, que sólo creen los que creen en estas cosas, de las previsiones económicas del gorbierno para no se sabe qué día de 2009 por la tarde, pero con una condición muy socialista. La crisis "deberemos pagarla todos", justos por pecadores, o los pobres por los ricos. Nada nuevo bajo el sol.

Y si los pobres, los de siempre, van a pagar las pérdidas millonarias de los millonarios, por mucho que el sabio Solbes diga que los créditos públicos a las empresas quebradas, no se concederán "con dinero de los contribuyentes", a mi me huele que el omnisciente vicepresidente económico y sus amiguetes no sacarán de su bolsillo los 50000 millones de euros que tienen pensado aportar a las empresas que han visto reconocidas sus especulaciones y su enriquecimiento a base del estraperlo económico de las necesidades de los ciudadanos, bendecido, cómo no, por el gobierno de Zapatero.

¿Posee entonces el Estado dinero público que no pertenece a los contribuyentes? O eso, o Solbes miente. Es decir, Solbes miente. Y ni la crisis se acabará un día de 2009 por la tarde, ni los 50000 millones del ICO irán a parar a todas las empresas, sólo a aquellas que hayan demostrado su pleitesía, ni los precios dejarán de subir, ni el Estado dejará de intervenir en el mercado para dar lugar a la creación de una sociedad absolutamente dependiente en materia económica, y por supuesto, ninguna de las acciones del gobierno han servido para paliar la decandencia de los ciudadanos que no poseemos una empresa y que no estamos exentos de pagar las desmanes y favores de los socios ricos del gobierno. Pero, no pasa nada, la crisis que no existe pero existe es culpa de Aznar, de Bush y de Mariano, que no se arrepiente de ello, como si la exigencia de Blanco fuese a cambiar algo, aunque en una cosa sí, la imagen de responsabilidad ante los once millones y medio de votantes. Por eso, Solbes, cual sabio, siempre será cascarón de huevo.

sábado, 19 de julio de 2008

La verdad ya no interesa a nadie

La destrucción económica de un país, como siempre, se refiere a la destrucción del sostenimiento económico de las familias de rango medio y bajo, más o menos, un 85% en España. El resto, poco preocupados por la crisis, se han encargado siempre de unir sus fuerzas a las del poder preponderante para garantizar sine die el mantenimiento de sus dineros y su nivel de vida. Sin duda, también están en su derecho.

El mismo silencio sobre la verdad del 11-M, como macabro ejemplo, forma parte de este proyecto totalitario de penuria económica urdido para aplanar las conciencias y, sobre todo, los intereses de los españoles. Imbuídos en la imposibilidad de mantener un nivel de vida aceptable, los españoles se dedican a obviar aquello que les aleja de ser manipulados y caen en la trampa de agradecer los regalos, que sin rubor, antes les han sido robados. Créditos en forma de medidas económicas presentados como acciones sociales vanguardistas y que por arte de birlibirloque han sido tomadas de los bolsillos de los españoles sin que éstos, pobres, se den ni cuenta.

Las acciones de un gobierno incapaz de paliar los efectos de una crisis, cada día y cada dato más, descomunal, han sido acciones promovidas para sumir a los ciudadanos en una pesadilla inconsciente del propio culpable, porque siendo capaces de asumir, el gobierno, su propia responsabilidad política, no lo ha hecho y pudiendo, ha omitido toda acción en favor de los españoles, de ese 85% por ciento que se cree las mentiras porque la verdad ya ha dejado de interesarles.

Un pueblo crédulo que ni sabe, ni quiere saber. Éste, sin duda, se perfila como el objetivo último de la política de Zapatero, que el pueblo delegue su propia responsabilidad como soberanos de sí mismos en los adanes de la nueva sociedad creada a imagen y semejanza del socialismo más atroz, y la ruindad económica de ese pueblo es el primer, y más fundamental, pilar para lograrlo. y vaya si lo está consiguiendo. (Foto: Redrick DeLeon)

miércoles, 2 de julio de 2008

Éstos son los datos

Éstos son los datos,


  • Número de parados oficiales en España: 2.390.424
  • Porcentaje de paro en España: 9,9%
  • Porcentaje de paro en la eurozona: 7,2%
  • Porcentaje de paro en la UE: 6,8%
  • Avance de la afiliación a la SS: 0,7%
  • Gastos desempleo en mayo de 2008: 1535 millones de euros (aumento de 30,8% con respecto a mayo de 2007)

  • Porcentaje de la inflación: 5,1%
  • Avance del PIB en el primer trimestre de 2008: 0,3% (Las previsiones del Gobierno en el ejercicio actual eran de un 3,8%)

  • Deuda privada nacional: 344% del PIB
  • Necesidad de financiación externa de España: 12% del PIB
  • Índice de morosidad: 1,302%
  • Euribor: 5,361%
  • Índice de pobreza en España en 2006: 20% de la población (8,9 millones de personas)
  • Índice de crecimiento de grandes patrimonios en 2007: 4% (164.000 personas con patrimonios superiores al millón de dólares)

  • Éstos son los datos. ¿Qué nombre le damos ahora a esta situación? ¿Poblemas económicos? ¿Crisis? Quizás, ¿ruina colectiva?

    jueves, 12 de junio de 2008

    Aires de huelga general

    La huelga de transportes, fundamentalmente, que estamos sufriendo todos los ciudadanos a día de hoy, durante el segundo gobierno de Zapatero -dato que no es baladí-, parece ser que no hace daño al Ejecutivo, ya sea por caradura, ya por incompetencia, ya por la una seguida de la otra.

    Yo, personalmente, me hago dos preguntas, sobre todo, dado que no puedo adquirir ni alimentos básicos ni el combustible que me ayuda a que, precisamente, pueda adquirir esos alimentos con mi propio sueldo. No es que sea transportista, pero los doscientos kilómetros diarios no hay quien me los quite del cuerpo. La primera, ¿dónde están los sindicatos que dicen representar a todos los trabajadores de este país, dónde están las manos alzadas y los grandes discursos de Fidalgo y Méndez, dónde están sus golpes de pecho, dónde sus promesas?

    La segunda, dada la peligrosa situación que están viviendo casi todos los ciudadanos españoles -no sólo pescadores, transportistas, agricultores, ganaderos, taxistas, albañiles, banqueros y constructores-, y dada la perspectiva desastrosa, a corto y largo plazo, de la situación económica y social española, ¿es legítima y viable una huelga general contra la política global de Zapatero, por su incompetencia, su inacción y su negación?

    Y eso es lo realmente grave. La crisis económica está dejando de serlo para convertirse en un gravísimo problema social, porque la situación de precariedad no sólo se expande ya a los más pobres, -los primeros que siempre sufren estas cosas-, sino a todos y cada uno de los españoles y en todos los ámbitos de sus vidas, desde la alimentación hasta el ocio.

    Aún tenemos memoria para recordar la huelga general de junio de 2002 contra la reforma laboral del gobierno de Aznar, ¿cómo se movieron los sindicatos? ¿Cómo se movió la oposición, cómo ladraba? ¿Cómo se movilizaron las asociaciones ciudadanas? ¿Cómo trabajaban los medios para denunciar la injusticia manifiesta del gobierno según su omnisciencia?

    Y como a cada guarro le llega su san Martín, la tan necesaria huelga general caerá por su propio peso, razones no faltan, para rememorar las grandes huelgas del felipismo, todas ellas con una razón fundamental, -a pesar de las reivindicaciones concretas-, la precaria situación económica que dejó a los españoles con el cinturón apretado muchos años más de lo justo y necesario. Oh casualidad, casualidad.

    miércoles, 4 de junio de 2008

    España va mal, pues me alegro

    Aunque sea el primer perjudicado, en el fondo me alegro de que España vaya mal, usando el símil aznariópodo de la bonanza económica. Y me alegro, porque, siendo optimistas en esto del dinero, todos los que han confiado ciegamente en Zapatero y Solbes, ahora sufrirán el fin de mes como con los que nos negamos a que éste bufón de la política siguiese riéndose de nosotros mientras su mujer se dedicaba al cante jondo.

    Me alegro porque todos los que se rasgaban las vestiduras ante el apocalíptico discurso de la oposición, ante la advertencia del hundimiento absoluto de las economías domésticas, tienen lo que se merecen, el fruto de su ceguera, el fruto de su incompetencia ciudadana, el fruto de su sectaria visión social, el fruto de su radicalismo ideológico y el fruto de su pleitesia bobalicona hacia unos ladrones.

    Yo soy el primer perjudicado, pero, a diferencia de los que han provocado que Zapatero bromee a costa de nuestras desgracias y que Solbes trate a los españoles como ignorantes y adeptos, yo no me siento engañado. Nunca me sentí engañado porque desde el principio supimos que Zapatero no era capaz de hablar ni inglés y que Solbes no había sido nunca, ni por asomo, el mejor ministro de economía de la historia de España.

    ¿Qué sentirán los votantes del PSOE que creyeron sin crítica que España estaría en la Champions League de la economía mundial -palabras muy fuertes-, y que ahora se quedan sin trabajo y sin fin de mes? ¿Se sentirán engañados? Yo, como he dicho no, pero por lo menos me cabe la esperanza de que vengan otros y sean capaces de poner un poco de cordura en algo que nos afecta directamente a todos, sobre todo, a los más pobres. ¿No era esto lo que decía el socialismo?

    El 3,8 se llamará en 2009 1,1. Y más del 50% de las familias españolas, que son unos pocos de millones no llegan a fin de mes, hoy, en el siglo XXI, en la gran España de Zapatero, ¿ahora qué?

    jueves, 21 de febrero de 2008

    Dos estilos, una propuesta (debate Solbes y Pizarro)

    Dos estilos, dos formas, dos visiones, una propuesta. Así se puede definir el debate entre Pizarro y Solbes en Antena 3. Quizás, más técnico que otra cosa, sobre todo, al principio del debate, Pizarro a intentado centrar la discusión en el tema del paro, mientras Solbes no ha dejado de cantar las bondades de la economía española inmerso en un mar de papeles con estad´siticas de colores de las cuales no explicó la procedencia.

    Por otro lado, la técnica de Solbes ha sido el ataque frontal a la persona de Pizarro, intentando que los espectadores percibieran que el número dos del Partido Popular no es más que un advenedizo a la política y que nada sabe de política económica. Frases como "no se lo han explicado bien", "los que le han informado lo han hecho mal", "quiero que reflexione lo que le voy a decir porque a lo mejor no lo sabe", no muestran más que el mismo talante de Zapatero, descalificar a la persona ante la falta de argumentos frente a las nuevas propuestas.


    Solbes ha manejado bien los tiempos, cosa que no ha hecho del todo Pizarro, aunque éste ha contrarrestado con una serie de datos cercanos a los ciudadanos, hipotecas, renta, presión fiscal, paro, la iniciativa privada y la bajada de impuestos. Solbes, por su parte, ha basado su discurso en las infraestructuras, en las grandes obras (proyectadas la mayoría por el PP) y ha justificado, en cierto modo, la subida de impuestos y la presión fiscal en orden a ese bien mayor que son las grandes infraestructuras.


    En la trifulca, ha ganado Solbes, por tablas, por la farándula de la descalificación y por el tremendo respeto de Pizarro a las reglas del debate. Aunque las propuestas coherentes las haya hecho Pizarro, por eso gana más allá de la imagen y de cualquier pasado. Sin duda. Ahora, el inicio de campaña, que ya hemos tenido en primicia lo que va a ser, pasado tergiversado frente a propuestas de futuro. Decalificación frente a respeto.
    Foto: elsemanaldigital.com

    jueves, 10 de enero de 2008

    El país cangrejero

    No es que el cambio climático haya provocado la reducción de las reservas de cangrejos, ni tampoco que disfrutar de este manjar en nuestra mesa se haya convertido en un privilegio sólo al alcance de los políticos que nos dicen lo que debemos y no debemos comer. España, en el año 2008, se enmarca en los parámetros de la España de 1995, justo cuando el guapo de Felipe no sabía donde meterse después de tanta mentira y tanto escurrir el bulto. Igual que ahora pero con más poca vergüenza.

    Si Andalucía es imparable, o va al máximo, España no va a ser menos, y la cuesta de enero se ha convertido en la caída en picado por antonomasia de este país, por mucho que el Ejecutivo de Zapatero se fije en la paja del ojo ajeno, y achaque los fallos a todo el que se le pase por la cabeza, cuando él, y sólo él, posee toda la responsabilidad de que España se haya convertido en un país que camina hacia atrás, que vive involucionando, que "cangrejea" huyendo del presente.

    España, pues, gracias a la irresponsabilidad ética y política de Zapatero, se ha transformado, en cuatro años, en un "país cangrejero", un país que camina de espaldas a la realidad, un país que ha gastado los recursos que le hacían mirar al futuro con esperanza, un país gobernado por los mandamases de las conciencias ajenas que ponen el grito en el cielo cuando se ejerce el derecho a la libertad de expresión, sobre todo, para poner sobre la mesa la ruina a la que han llevado a España.
    Si le preguntamos a Zapatero cuál es su animal favorito, podemos estar seguro de que se decantará principalmente por dos, el buitre y el cangrejo. El uno por opción moral, y el otro, por opción política. Desprogreso en estado puro. Zapatero en estado puro.

    martes, 8 de enero de 2008

    Mejor con la cartera

    Estoy casi seguro, aunque ojalá me equivoque, de que Zapatero se volverá a alzar por encima de las cabezas de todos los españoles el 9 de marzo por la noche, manifestando que no les defraudará, que han elegido la opción correcta y que promoverán una España de progreso donde todos, hasta los "peperonis" tendrán su lugar. El discurso será triunfalista, pero no por ello, menos cierto en los términos propios del ardor de la victoria.

    Dicen que el español de a pie suele acercarse a las urnas con una papeleta en una mano y, en la otra, con la cartera. Pero si esto fuera cierto, el Gobierno de Zapatero estaría dando sus últimos coletazos. Y digo coletazos, porque el fin de la legislatura socialista se está pareciendo más, que a la agonía del pez, a un trato de rencor, como si los españoles no hubiésemos sido esos enfeudados labradores que pertenecen con la tierra a su señor, y nos hubiéramos rebelado, al fin, ante la ineptitud y el abuso de los mandamases.

    El trato de Zapatero hacia los españoles ha sido, desde el primer día en que derogó la Ley de Calidad de la Educación hasta las últimas críticas de su Gobierno a las familias y a la Iglesia, un despropósito que los españoles no se merecen, o sí. Y como para los socialistas todos los conceptos que vertebran nuestra sociedad y nuestra cultura son discutidos y discutibles, también habrá que hacerles comprender que su Gobierno, indiscutiblemente, es una lacra para España y para la dignidad de todos los españoles. Y si éstos votan con la cartera y el monedero en la mano, pues mejor.

    lunes, 17 de diciembre de 2007

    Propinas, conejos y caviar

    Lo de este Gobierno no tiene nombre. No porque mienta más que hable o porque la ignorancia de sus ministros nos provoque esa sensación de un mundo al revés, donde la dura realidad se convierte en ilusión si no es conforme a la única verdad posible, la del Gobierno de Zapatero. Lo de este Gobierno no tiene nombre porque ha llevado a millones de españoles a celebrar la Navidad más pobre de los últimos años. Es la pura verdad.

    Los comercios están llenos de productos, pero no podemos comprarlos, como todo hijo de vecino, porque, según Solbes, los españoles somos unos manirrotos, derrochadores del dinero que podríamos invertir en pavo o cordero para cuando éstos quedan mejor en la mesa familiar. Demasiados hijos, demasiadas salidas a restaurantes, demasiadas propinas, demasiados caprichos... lo próximo será prohibir los regalos del Día de Reyes con la excusa de que hay 364 días más al año para regalar.

    Y es que, el Gobierno de Zapatero se ha sacudido la caspa del hombro inundando a los españoles con su irresponsabilidad y con su incapacidad para la gestion. Ha culpado a los españoles, como si fueran adolescentes inberbes, del trabajo mal realizado que les pertenece a ellos, y sólo al Gobierno, por mandamases, y porque lo cobran muy bien. No nos ha de extrañar ninguna de las palabras de ninguno de los ineptos cobradores de lo público, porque, desde el principio, el Presidente del Gobierno se ha puesto como meta establecer un estado socialista, y ya sabemos lo que eso significa. Todo lo que se pueda, para los ricos y todo lo de los pobres, para pagar las cosas de los ricos. Lo de siempre. Es que para ser socialista, o comunista, hay que ser rico, "joer".

    Seguro que los "bien-hacedores" del Gobierno de Zapatero no comerán, ni mucho menos, conejo en la cena de Nochebuena, aunque los de la cunicultura se quejen de la propaganda que les han hecho. Y si el caviar puede adquirirse esta Navidad desde 2000 a 8000 euros el kilo, será porque hay gente en España que lo compra. Seguro que Solbes, Zapatero y Rubalcaba son los primeros, faltaría más.