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miércoles, 15 de junio de 2011

El Papus

El Papus fue la revista humorística de la Transición, aunque sus primeros pasos los dio todavía en tiempos de Franco.
Más acorde con los nuevos tiempos de libertad que se vivían. Más irreverente y cáustica que ninguna. Una de sus intenciones claras era provocar. Por supuesto no dejaba títere con cabeza ni estamento social que no tocara: los políticos, las instituciones, la Iglesia… “Revista satírica y neurasténica”. Su estilo era duro, directo, temerario, descarado y hasta gamberro, como correspondía a una publicación que se desenvolvía en una democracia recién estrenada y de la que se esperaba más de lo que daba en un principio.


Más ácrata que los propios anarquistas, sus redactores popularizaron el lema: “Ni Dios, ni amo, ni CNT.” Con ello indicaban que no “se casaban con nadie” y que su independencia estaba fuera de toda sospecha.
En 1977 fue víctima de un atentado terrorista por parte de la organización de extrema derecha la Triple A (Alianza Apostólica Anticomunista), un paquete bomba en la redacción que acabó con la vida del conserje y provocó más de una docena de heridos.
Tiempos bárbaros aquellos en los que los fascistas no aceptaban el cambio hacia la democracia, protagonizando de vez en cuando actuaciones como esta o como la que contaba en otra entrada, la que sufrió La Vaquería en Madrid.




Grandes figuras del cómic y de la ilustración pasaron por ella como Carlos Giménez (el de los niños orejones de posguerra), Manolo Vázquez (el de Anacleto, las hermanas Gilda y la familia Cebolleta), Manel, Óscar, Ventura & Nieto, Já, Ivá
Aunque su calidad y acabado técnico era inferior a la de otras publicaciones, su estilo agresivo, rebelde y hasta valiente al atacar los valores establecidos la situó en un lugar destacado entre las demás. Ello le supuso el ser secuestrada y suspendida varias veces. En 1987 acabó su carrera de muerte natural. Lo que no consiguió la bomba terrorista lo logró el hartazgo de sus lectores, cada vez más reducidos.